domingo, 27 de agosto de 2017

LA CIGÜEÑA BLANCA, en POYATOS. ( CUENCA )


    Este blog quiero dedicar especialmente a mi madre, por aquellas historias que me contaba durante mi niñez, sobre la visita de la Cigüeña blanca posada sobre los tejados de los edificios mas altos de nuestro pueblo.
   La cigüeña siempre se consideró un ave de buen agüero, símbolo de fecundidad, de riquezas y por supuesto de concepción. En todo el mundo muchos cuentos y leyendas la consideran la buena mensajera que anuncia un nacimiento o bien, simplemente, ella misma trae un bebé recién  nacido en vuelto en un retal de ropa blanca sostenido en la punta de su largo pico.
Durante mi niñez recuerdo  decir a mi madre en cada nacimiento que había en Poyatos,  has visto a la cigüeña blanca volar  junto a los pinos de Cerro Gordo.  ¡¡ A traído un bebé.!!.. Gracias  mamá por aquellas bonitas historias.






                                               CIGÜEÑA    BLANCA 
                                
          Todas las fotografías han sido realizadas en Poyatos.


          


Fotografías realizadas el 15 y 16 Agosto 2017, Cámara Canon 6D



    La península Ibérica es punto de descanso durante la emigración, ademas, la  Península representa también un área de paso  obligado para las cigüeñas originarias de Centroeuropa, Dinamarca, Alemania y Paises Bajos, que viajan principalmente por las provincias mediterráneas hasta el área de Gibaltar para cruzar el Estrecho entre finales de Agosto y Septiembre.  Poyatos situado en plena Serranía de Cuenca y anclado sobre  un rellano  o aplanamiento  a cierta altura llamado  hombrera, es un lugar tranquilo para esas pequeñas paradas de descanso. Como un caso causal y anecdótico  los vecinos de Poyatos vivieron esta imagen el 15 de Agosto de 2017.






    La cigüeña blanca esta muy ligada al hombre y a su actividad productiva, razón por la que ocupa, preferentemente hábitats abiertos  transformados, como dehesas, regadíos, cultivo de secano, así como zonas húmedas. Por eso, es curiosamente verlas por Poyatos porque evitan  las áreas predominantemente forestales y las muy montañosas. 





     Pocas aves resultan tan familiares como la  cigüeña y pocas están tan arraigadas en las tradiciones como esta enorme zancuda que un día abandonó sus  hábitos montaraces para asociarse al hombre en busca de sustento. esta especie hubo de soportar durante el pasado siglo una serie de drásticos cambios en los paisajes y los usos rurales que la llevaron a desaparecer en muchas regiones y de los que hoy día, en parte  a un cambio de hábitos se recupera asombrosamente.




La Cigüeña Blanca es un ave tan conocida y popular en la mayor parte de la Península Ibérica que todos alguna vez hemos observado su bello vuelo. Los adultos de ambos sexos tienen el plumaje del cuerpo y alas totalmente blanco, excepto las plumas primarias y secundarias de las alas que son de color negro azabache. También la cola es blanca. Pero si la coloración del plumaje resulta inconfundible sus largas patas rojas y el pico igualmente de color rojo son caracteres muy distintivos.





    Las cigüeñas jóvenes  tienen las patas y el pico de color pardo rojizo y se identifican fácilmente por poseer un tinte marrón o parduzco en las plumas escapulares y en las cobertoras alares. Después del primer invierno las diferencias con las  cigüeñas adultas son muy ligeras.  La silueta de vuelo de la Cigüeña Blanca es inconfundible, el cuello bien extendido hacia  adelante y las largas patas sobresaliendo  por detrás de la cola, son detalles muy conspicuos que añadir al diseño de alas y cola  y al color del plumaje blanco y negro.




    Hace muchos años invernaban principalmente en África. Su llegada a España desde  tierras africanas marcaba el inicio de la primavera. Desde el siglo pasado se comenzó a observar la inervación de algunas cigüeñas en el sur de España. En las últimas décadas cada vez son más las cigüeñas blancas que están invernando en la península ibérica