Fotografia realizada 7 Abril 2013. Cámara Canon EOS 60D.... ISO 100 f 0´5 V 18
NACIMIENTO DEL RIO CUERVO
Después de treinta años, mis ojos observan nuevamente esta impresionante imagen, el nacimiento del Rio Cuervo. Los primeros años de mi infancia crecí en Poyatos rodeado de grandes pinares, situado en plena serrania de Cuenca. Recuerdo aquellas carreteras simi-empedradas y polvorientas por donde circulaban en verano algún Seiscientos, Ochocientos cincuenta y R8. Vehiculos de familiares y amigos que durante los años sesenta iniciaron la emigración a las grandes ciudades y el más pudiente regresaba de vacaciones con algunos de estos autos.
Durante su estancia en el pueblo, el nacimiento del Rio Cuervo sería unos de los puntos de interes para visitar durante sus vacaciones, fué entonces cuando descubrí esta maravilla por primera vez. Y también la primera vez que subí aún coche.
MONUMENTO NATURAL
El nacimiento del río Cuervo fue declarado Monumento Natural en 1999 y ocupa una superficie de 1709 hectáreas. En este lugar, el agua brota de un manantial travertínico y escurre por enormes estalactitas de roca calcárea (toba) recubierta de musgo, formando unas largas y bellas chorreras que se congelan en invierno, ofreciendo una bella estampa fotografiada miles de veces cada año. En el nacimiento se pueden observar grutas tras las cascadas y simas en sus alrededores y es relativamente frecuente que se produzcan, de manera natural, derrumbamientos de sus barreras tobáceas.
Su particular localización hace que en este lugar exista un microclima continental húmedo, albergando una flora única, siendo buen ejemplo de ello las diversas especies de orquídeas presentes en la zona. El resto de especies destacables constituyen una variada vegetación ripícola arbustiva y arbórea como lo son los tilos, avellanos, arces negros, tejos y acebos que acompañan a los ejemplares de pino laricio y albar típicos de la serranía conquense.